La piloto Cristina Gutiérrez asegura que, "correr el Dakar, me enseña cada año un valor nuevo, además de ser una aventura"

La bugalesa es una de las protagonistas de 'Dakar: Carrera contra el Desierto', una película documental dirigida por Jalifa Lespert, disponible en las principales plataformas digitales desde el pasado mes, que se sumerge en los entresijos del considerado 'raid' más duro del mundo.

"Para mí y supongo que para muchos de los pilotos que salen en el documental, ha sido la primera vez que he participado en algo así. Grabarnos durante una prueba tan dura como es el Dakar ha sido un reto para todos, especialmente para el equipo de rodaje", ha asegurado Gutiérrez en una entrevista.

Gutiérrez no olvida que, además, la grabación se realizó en la edición de 2003, donde hubo "unas condiciones climáticas bastante adversas" y con el "famoso río" en el que se quedó atrapada por las inundaciones. "También para el equipo estar con todos los pilotos al mismo tiempo era muy complicado, así que puedo decir que ha sido un éxito, porque es una prueba que no es nada fácil de grabar y de transmitir todos los valores que se querían transmitir".

Para la piloto de Dacia, el 'raid' "es una prueba de competición", que también guarda "muchos valores y muchas cosas que hasta ahora faltaban por explorar y enseñar al público en general". "Creo que, con este documental, se van a conoocer valores del Dakar tan importantes como el trabajo en equipo, el esfuerzo y la superación. Que hayan sido capaces de mostrar todo esto en la película para mí ha sido todo un éxito", ha afirmado.

En este sentido, aunque no hiciese "falta" que el Dakar "se abriera a más público", porque el aficionado al 'motorsport' "es un nicho muy concreto", este documental permitirá ampliar el rango y "generar impacto en otras personas, que se puedan ver inspiradas por los valores del Dakar".

"Eso hace que la carrera en sí crezca y también los aficionados por el mundo del motor y, en concreto, por el Dakar. Es verdad que, hoy en día, con las plataformas y con los nuevos medios se puede llegar a las nuevas generaciones".

Gutiérrez ha explicado que este documental ofrece "la oportunidad" de ver otros aspectos del Dakar, de tinte "más personal", así como de su preparación. "Es una oportunidad que me hubiese gustado disfrutar cuando era pequeña: la de ver y, sobre todo, de empatizar con los pilotos, los copilotos y el resto de los involucrados en la carrerra. Cuanto más natural y más real te muestras, creo que eres capaz de llegar a más público", ha agregado.

La castellano-leonesa avisa de que "lo más complicado" de esta carrera es que "no hay nada concreto, pensado, ni estudiado". "Sales en cada etapa a un sitio que la organización te prepara como un reto y no sabemos por dónde vamos a ir", puntualizó.

"El desierto, entorno hostil"

Respecto al título de la película, 'Dakar: Carrera contra el desierto', considera que "quizás va más con la dureza del desierto, porque pone a prueba tanto a la máquina como al piloto".

"El desierto es un entorno muy hostil y más en el 'Empty Quarter', que es el más grande del mundo y muy desconocido, porque casi nadie lo ha pisado, nada más que nosotros, porque es muy inhóspito. El Dakar es una prueba de gran dureza, que te obliga a poner al cuerpo y a la mente al límite", remarcó.

Tampoco le desagrada el concepto de aventura que tiene el 'raid', aunque "obviamente es competición". "Y más ahora, cuando estamos en equipos oficiales. Pero, para mí también es una aventura, porque vas superando dificultades", ha aclarado la piloto, que tiene una opinión diferente a la del veterano Carlos Sainz, que dejaba claro que él iba a "ganar".

"Quizás Carlos ya es más maduro en ese sentido y ha vivido más situaciones y lleva muchísimos años en el mundo del motor. Pero, para las generaciones nuevas que estamos entrando, viviendo sensaciones diferentes y aprendiendo a lidiar con nuestros egos y nuestras personalidades, sí que es una aventura, porque cada año el Dakar me enseña un aspecto diferente y un valor nuevo. Estoy muy agradecida a la carrera, porque tengo la suerte de haber madurado, por así decirlo, con ella", ha explicado Gutiérrez.

Cristina recuerda que empezó "muy joven, con 18 años" en el mundo de los rallys y que debutó con 25 en el Dakar. "Ya son algunos 'Dakares' los que llevo encima, pero considero que aún me queda mucho que aprender y, sobre todo, espero hacer muchos más en ese proceso de aprendizaje".

Tras ganar en 2024 la categoría 'Challenger', en 2025 ha competido en la principal, 'T1+', un ilusionante estreno que no fue finalmente positivo, porque tuvo que abandonar tras la etapa 2, aunque pudo continuar compitiendo sin efectos clasificatorios y como apoyo a sus compañeros de equipo.

"Muchas veces el Dakar te guarda momentos que no esperas y, obviamente, para mí no ha sido el que me hubiera gustado, pero a la vez he sacado cosas muy positivas, sobre todo porque ha sido mi primer año en un equipo oficial, el trabajo en equipo ha florecido más que nunca y me he sentido muy bien dentro de ese papel", ha explicado la española.

Gutiérrez ha confesado que el rol que le tocó cumplir desde entonces en el 'raid' le impactó de primeras. "No me esperaba tener que hacerlo desde tan pronto, pero nos lo tomamos muy bien y de forma muy profesional. Además, el equipo nos ha dado millones de veces las gracias, porque es verdad que Nasser (Al-Attiyah) probablemente sin nosotros en ese momento y sin Pablo (Moreno, copiloto de la española) con sus manos mágicas, no hubiese podido obtener un cuarto puesto. Para el equipo, era importante tener integrantes que respondieran en esos momentos", ha admitido.

Referente, también para los momentos malos

De todos modos, tanto el éxito de 2024 como el revés de esta edición son motivantes para la piloto. "Tengo ganas de demostrar y de desquitarme. Creo que hicimos un Dakar superlimpio, muy inteligente y muy constante. Creo que si en 2026 tenemos oportunidad también de hacerlo sin paradas y siendo igual de constantes podemos hacer un gran resultado. Sinceramente, a nivel deportivo, si conseguimos hacer lo mismo podemos estar arriba", ha remarcado.

"Se hace largo, pero corto", ha puntualizado sobre la espera entre Dakar y Dakar. "Son muchos preparativos, pero también se hace corto, porque no sé si cada vez que cumple un año más el tiempo se hace más rápido. Lo esperamos con mucha ansia y también tenemos unos test que cumplir y carreras que hacen que aún tenga más ganas de llegar al Dakar lo mejor preparada. También es importante disfrutar del camino".

Finalmente, respecto a su papel como referente para otras mujeres en el mundo del motor, ha asegurado que "nunca imaginé que llegaría a serlo, porque, cuando empiezas a competir, vas haciendo tu camino. Pero, ahora sí que es verdad que siento la responsabilidad y la oportunidad de poder transmitir todo lo bueno y lo malo, también. Creo que sólo decir lo bueno no hace que inspires a las personas, porque hay niños y niñas que igual se inspiran en tus malos momentos y cómo has sabido resurgir de allí".

"Tenemos la responsabilidad de mostrarnos tal como somos, para inspirar a otras personas a plantearse sus retos, sueños y objetivos, no sólo de competición, sino en sus vidas", ha concluido.