Tres enmiendas a la totalidad de Más Madrid, PSOE y Vox; decenas de enmiendas parciales y hasta 3.500 alegaciones de colectivos vecinales y empresariales contestan a la modificación de la ordenanza de Terrazas que Villacís pretende elevar al Pleno de Cibeles antes de que finalice el año.
Uno de los puntos de disenso han sido las zonas saturadas, las inicialmente denominadas como tensionadas. En la modificación normativa prevista Villacís se ha comprometido a que será obligatoria la publicación del mapa de estas zonas saturadas en el Portal de la Transparencia, además de actualizarse cada seis meses y darse cuenta de él cada año al Pleno del Ayuntamiento.
Así lo recoge el texto, después de que la Junta de Gobierno celebrada el pasado 16 de diciembre diera luz verde al texto de la propuesta que modificará la actual ordenanza de Terrazas y Quioscos de Hostelería y Restauración, desfasada al datar de 2013.
De las alegaciones, ya han sido admitidas 29, centradas especialmente en garantizar la accesibilidad ampliándose, explicaba Villacís, las distancias destinadas a reservas de estacionamiento para personas con discapacidad, al pavimento podo-táctil y a otros elementos de mobiliario. También se ha incorporado la paralización de autorizaciones de terraza en zonas saturadas, mientras se delimitan y aprueban.
Los socialistas, fuera de la tercera reunión
Vicealcaldía quería conseguir un texto de consenso y para eso convocó mesas con los grupos políticos y, a instancias de estos, con la participación de representantes vecinales, hosteleros y comerciantes. En los encuentros se abordaron desde la figura de los foodtrucks, la permanencia temporal de las terrazas en bandas de estacionamiento o la posible eliminación de las estufas de gas.
Sin embargo, para la gran parte de la oposición estas mesas no han sido más que "un paripé", en palabras de Más Madrid, y provocaron que el PSOE dejara de acudir ya en el tercer encuentro por "la falta de compromisos", al no fijarse previamente las zonas saturadas.
Vox también se ha mostrado crítico con los trabajos realizados y con la propia vicealcaldesa, a quien han renombrado irónicamente como 'Begoña Terracís', algo que ella se ha tomado con humor.
En las cuentas de Villacís para sacar adelante la modificación, el Grupo Mixto juega un papel esencial. Sin ellos y con el 'no' presumible del resto de la oposición, el texto no sería aprobado, pero los cuatro ediles escindidos de Más Madrid ya han adelantado que se han encontrado con "buena predisposición" para consensuar con el Gobierno. También el Grupo Mixto puede ser la solución para que el Ejecutivo de PP y Cs apruebe las cuentas de 2022.
Ya en el Pleno de noviembre, el Grupo Mixto se unía a PP y Cs para tumbar la proposición presentada por Más Madrid, apoyada por PSOE y Vox, para que la modificación de la ordenanza de Terrazas fuera retirada, se convocaran nuevas mesas de trabajo y con sus resultados se redactara un nuevo texto, no una mera modificación.
El Mixto no ha ocultado la "buena predisposición" del área a la presentación de propuestas como la definición de zonas tensionadas y la homogeneización estética. Defienden que se levanten las terrazas que generen conflictos y aquellas que no, pero se encuentren en zonas tensionadas.
Oposición vecinal
El rechazo al texto también ha venido de mano de las asociaciones vecinales, principalmente de aquellas zonas saturadas, como Ponzano, donde son constantes las manifestaciones y caceroladas, mostrando su oposición a la extensión en el tiempo de las terrazas COVID.
Esa oposición se trasluce también en el recurso contencioso-administrativo interpuesto por la asociación vecinal El Organillo de Chamberí contra el Ayuntamiento de Madrid por su "inactividad" y en defensa de los derechos fundamentales ante el problema del ruido de las terrazas y los locales de hostelería del distrito, que incluye zonas como Ponzano.
El recurso reclama "que se proceda de forma inmediata a la retirada de todas las terrazas autorizadas extraordinariamente en la calzada o en la acera por haber desaparecido la situación que las motivó".
Se prolongarán, si vuelven las restricciones
Las terrazas COVID de bares y restaurantes en la capital podrían continuar en pie más allá del 31 de diciembre de 2021, con independencia de estar o no en zona saturada si se vuelven a adoptar restricciones y limitaciones de aforo en el interior, avanzaba esta semana la vicealcaldesa, Begoña Villacís.
"Si las limitaciones de aforo fueron las mismas que en mayo del año pasado, tendríamos que buscar la manera de mantener las ampliaciones", expresaba, para afirmar que ante la sexta ola, "la hostelería vuelve a estar en una situación crítica".
Por ahora, el proyecto de ordenanza de Terrazas, aún provisional, establece que las terrazas COVID de la capital continuarán dos años más en pie, salvo en aquellas zonas que estén tensionadas, en las Zonas de Protección Acústica Especial (ZPAE), que son Centro, Gaztambide y AZCA y en las ZAP, que se ubican en Chamartín, Chamberí, Vicálvaro y Salamanca.
Así, la capital perdería a comienzos del próximo año hasta 69 terrazas ampliadas en la actualidad a bandas de aparcamiento de Zonas Ambientalmente Protegidas (ZAP) y Zonas de Protección Acústica Especial (ZPAE).
De este modo, se eliminarán hasta 46 terrazas que ocupaban bandas de aparcamiento en ZAP, un número que baja hasta las 23 terrazas a eliminar en las ZPAE. A ellas, hay que sumar la reversión de las ampliaciones de terraza en acera, un total de 2.976 terrazas que volverán a su estado prepandemia, en 2022.
El área delegada de Coordinación Territorial estimaba que sobrevivirá un tercio de las terrazas ampliadas dentro de la M-30, y dos tercios seguirán en pie fuera de este perímetro. Sí continuarán las mesas altas de baja ocupación (con dos taburetes) y las terrazas en zonas terrizas.