Las mejoras del parque 'de Las Cataratas' eliminan las barreras arquitectónicas e implementa juegos de integración

Conocido por los vecinos como parque 'de Las Cataratas', debido a que cuenta con una fuente de cuatro alturas que se asemeja a una cascada, tiene una superficie de 31.987 metros cuadrados y es escenario habitual de conciertos, actuaciones y diferentes actividades para niños y mayores.

Las obras dieron comienzo el pasado 20 de junio, tienen una duración prevista de cinco meses y una inversión de 407.000 euros. El proyecto comprende la mejora de la pavimentación de los caminos, la remodelación paisajística de los parterres vegetados, el acondicionamiento de las zonas estanciales, infantiles y caninas, y la implementación de juegos infantiles de integración, elementos deportivos y biosaludables para los mayores del distrito.

Árboles y más zonas con sombra

El parque cuenta, en la actualidad, con una amplia gama de arbolado y las nuevas plantaciones pretenden dar continuidad a su diseño inicial. Se plantarán ejemplares de almeces y aligustres en la zona sur, junto al espacio estancial próximo al área de juegos infantiles, para proporcionar zonas de sombra que redunden en el mayor confort térmico de los usuarios.

El proyecto contempla la plantación de arbustos con un tamaño de crecimiento avanzado, para conseguir un efecto inmediato en el momento de la plantación: serán especies que están adaptadas a las condiciones climáticas de Madrid, preferiblemente autóctonas. La actuación comprende doce parterres del parque, en los que se añadirá corteza de pino para evitar la aparición de malas hierbas, mejorar el drenaje del terreno y así evitar la evaporación del agua de riego y estabilizar la temperatura del suelo mediante la protección de las raíces de las plantas.

Estas actuaciones entroncan con la política medioambiental del Ayuntamiento, centrada en una jardinería sostenible, compatible con el clima de la zona, optimizada al máximo y que fomente la biodiversidad, al tiempo que permita el ahorro de agua y de recursos, tanto humanos como materiales.

Nuevos espacio, para niños y mayores

El área infantil de la zona sur del parque, de 387 metros cuadrados y próxima a la calle de Sierra de Bobia, será reestructurada. Se modificarán sus juegos y se instalará suelo de caucho de colores, por favorecer la accesibilidad, aportar seguridad ante el riesgo de caída de los más pequeños y ser resistente a bajas y altas temperaturas. Esta zona de juego para niños de entre 0 y 12 años contará con elementos de integración, como un columpio cesta nido, un balancín, un carrusel giratorio y una torre multijuegos.

Además, el proyecto contempla la creación de una zona de ejercicios de calistenia, de 546 metros cuadrados, en la que se instalarán pesas magnéticas, banco de abdominales, espaldera, barras horizontales, barras escalera y barras paralelas.

Finalmente, el nuevo espacio destinado a ejercicios biosaludables, de 666 metros cuadrados, contará en su interior con elementos de mejora de la movilidad de las extremidades superiores e inferiores y de pectorales, como elíptica, marcha, remo y prensa de piernas. Como complemento, se crea otra zona de ejercicios de bajo impacto para mayores, con 228 metros cuadrados, y contará con un elemento deportivo para liberar la tensión muscular de cadera y espalda y otros dos de juego de pedales con banco ergonómico.

Zona canina y eliminación de barreras arquitectónicas

El área canina será ampliada: pasará de 70 a 268 metros cuadrados. Tendrá un vallado perimetral y, en su interior, contará con elementos para entrenamiento de las mascotas, como un túnel, vallas de salto y una rampa. Será un espacio de convivencia para los distintos usuarios del parque, ya que se permitirá la permanencia de los perros sueltos en las áreas verdes públicas, sin que presenten molestias para otros usuarios.

Las obras implicarán la instalación de distintos tipos de pavimentos y encintados, en función de la zona y el uso al que se destina, para mejorar la circulación de los usuarios. En términos de accesibilidad, se eliminarán las barreras arquitectónicas y las entradas principales y varias escaleras se adaptarán a la legislación en este terreno, al incluir pasamanos y rehabilitar las zonas estanciales y los caminos existentes con jabre.

El drenaje y la gestión de aguas pluviales se optimizará, con el objetivo de evitar escorrentías y encharcamientos de las superficies y, al mismo tiempo, incrementar su aprovechamiento en los cultivos presentes en el ajardinamiento